Curavacas (2520m)

Distancia recorrida: 12.62 kilómetros
Altitud min: 1,334 metros, max: 2,529 metros
Desnivel acum. subiendo: 1,475 metros, bajando: 1,450 metros
Grado de dificultad:  Moderado

Segundo dia en Alto Carrión y el dia amanece despejado. Tenemos varias horas hasta que entren las nubes de evolución que anuncia la meteo. Al final nos decidimos por el Curavacas, posiblemente la cima más mítica del Alto Carrión, una espectacular mole de conglomerado de 2520m. Si bien la cima más alta de la provincia de Palencia es la cima su de Peña Prieta o infiernos con 2530m, Curavacas ha sido catalogada como la cima más alta de la provincia palentina. Este asunto siempre esta rodeado de polemica, pero a mi juicio personal, podemos catalogar a Curavacas como el techo de la provincia palentina, puesto que infiernos se trata de una cima secundaria además de no ubicarse integramente en la provincia.

Para saber más de esta polémica, recomendamos pichar aquí

Así, emprendemos la segunda aventura en el Alto Carrión. Salimos del pueblo de Vidrieros, por una pista que toma dirección E. Al llegar al cauce del rio la pista se convierte en un sendero que esta balizado y se adentra poco a poco en la imponente cara sur de Curavacas. Iremos por sendero a la orilla del rio hasta llegar a un amplio llano donde tendremos como referencia el inicio de la via del “callejo grande”. Nos introduciremos en una incomoda pedrera donde iremos remontandola con algo de penuria, siguiendo los hitos y buscando los sitios más cómodos. Desde aquí divisaremos a la perfección la Canal Sur de Curavacas y la via de la “Y”, dos vias de nombre en el alpinismo del Carrión. Ambas se encuentran en condiciones desconocidas para nosotros y proseguimos nuestra marcha hacia el callejo, su via normal.

Una vez introducidos en el callejo deberemos ir sorteando las puntuales dificultades, por terreno empinado y a ratos inestable, pero a pesar de esto se remonta relativamente cómodo.

Las condiciones invernales existentes en el callejo nos va ha hacer ponernos crampones y sacar el piolet para superar la parte final del corredor y su paso a la cara norte para hacer cumbre. La nieve esta muy dura, los crampones no se clavan bien y debemos remontar con precaución los 45-50º del corredor. Superado este paso, tendremos que superar el paso a la norte, un paso mixto con una exposicion considerable al valle de Pineta. Aquí es recomedable, en estas condiciones, asegurarse con un cordino. Nosotros lo hacemos a pelo, prestando muchísima atención y siendo un poco inconscientes fruto del exceso de confianza.

Una vez superado este paso, es importante marcarlo con el GPS (si disponemos) ya que en caso de niebla puede ser un callejón sin salida y nos podemos meter en serios problemas. No me gustaria ser alarmista ni crear miedo, pero es mejor seguir una pautas de comportamiento para evitar sustos.

Superado este paso, debemos remontar una inclinada pala llamada “la llana” que nos llevará hasta la cima, superando una cortísima y aerea cresta de nieve (donde es solo caminar) para llegar al vertice geodésico de Curavacas (2520m).

Tras una breve estancia en la cima, emprendemos el camino de vuelta con la inquietud de saber como superaremos el delicado paso. Al final lo solventamos destrepado por el conglomerado, despues destrepando un cacho de corredor y de nuevo destrepando por la roca, con pasos de II en mixto, donde los crampones rascan de los lindo. Es cuestión de buscar los mejores sitios y no arriesgar más de la cuenta. Además es posible habilitar un rappel que nos haga descender más rapidos y seguros.


De vuelta a la normalidad, descendemos el callejo y empieza a caer unos copillos de nieve que frustra otras expediciones. Saliendo del callejo solo reseñar que la pedrera esta muy bien en el descenso, es muy comoda y divertida y que el resto del trayecto lo pasamos en buen ambiente y con una enorme satisfacción. La guinda del pastel es la cerveza en el bar “El Lago” de Vidrieros, una gente muy sana y simpatica, con Ulma y su banda de cachorrillos amenizandonos la tarde.